De las 50 sombras de Grey...



Sí les gustó el libro lean, no lo tomen personal y opinen; si no les gustó, enriquezcan esta entrada comentando el por qué.


#YoConfieso que comencé a leer este libro por el mismo motivo por el que seguramente lo han leído millones de mujeres en el mundo: curiosidad. Más allá de los argumentos que pueda exponer en este post, lo cierto es que la campaña publicitaria de esta trilogía fue bien pensada y con un target muy evidente. 

Para muestra está el comercial del día de las madres hecho por Amazon. 


Es justo ahí en donde queda más que claro el origen y objetivo de los libros de esta "escritora" británica. Y entrecomillo su oficio porque si bien se necesita talento para enlazar una historia en casi 1000 páginas divididas en 3 libros, lo cierto es que el talento de lograrlo dista mucho de la calidad de una publicación (para muestra están también los famosos libros de Stephenie Meyer: un éxito "fugaz" pero contundente en librerías, taquillas, souvenirs, etc. Y sí, ya sé que apenas viene la tercer película, pero cuando digo "fugaz" me refiero a que evidentemente no son libros para la historia)

Desde mi muy humilde opinión y habiendo leído únicamente el primero de 3 -y con nula intención de leer los dos siguientes- opino que es un libro por demás barato. El lenguaje es tan pobre que es una lectura "dominguera", la mujer simple y sencillamente no conoce los sinónimos, por lo que las palabras e incluso las frases se repiten una y otra vez.

Comencé a leerlo en español y fue frustrante, terminé por leerlo en Inglés y no hubo grandes cambios. Mal escrito y mal traducido, punto.

Ahora, el meollo del asunto, el supuesto erotismo que venden, pues he de decir que la línea divisoria entre el erotismo y la pornografía es por demás transgredida. Escribir erotismo es todo un arte ya que implica subir la temperatura del lector sin recurrir a lo más gráfico, valiéndose del sutil arte de la sugerencia que puede ser muy sucia pero al mismo tiempo es de muy buen gusto, y para lograr eso se necesita ser rico no sólo en experiencia e información sino en lenguaje. Por obvias razones  E.L James opta por combinar lo evidente con lo irreal y no tengo idea cómo piensa hacer una película.

Me queda muy claro por qué es un éxito a nivel mundial y aunque no voy a entrar en detalles, creo que tiene que ver con los ideales sexuales y emocionales que muchas mujeres tienen en mente; con la irrealidad, con un sinfín de cosas que hacen de este libro la fórmula perfecta para creer que Christian Grey es el hombre ideal... y sí, es justamente eso: un hombre tan ideal como irreal. Y claro, no puedo dejar a un lado en la fórmula del éxito la parte del sadomasoquismo, ese mundo oculto que coquetea cínicamente con la curiosidad.

Le doy el crédito a la autora de haber logrado que terminara de leerlo; quiere decir que dentro de tanta queja, algo me enganchó por 365 páginas, pero hasta ahí llegué. Juro que si leía una vez más el famoso "Im having you now" iba a terminar por aventar la Tablet.

Un libro de tienda de aeropuerto, pal avión, pal fin de semana, pal desahogo de las frustraciones y las fantasías mal logradas; quizá de eso último proviene su éxito, de los frenos femeninos. Sepa.

Comentarios

  1. Coincido ampliamente contigo, yo ya leí los tres libros y desde el primer capitulo me quedo clarísimo que era solo una lectura así como pasajera sin ninguna trascendencia y el target desde el primer momento es clarísimo, definitivamente para lectura de ese genero me sigo quedando con el Marqués de Sade y digamos que su éxito se basa en presentar un amor idílico solo que de manera retorcida porque la duda que me queda es ¿Cuántas de sus lectoras estarán dispuestas a una relación así en la vida real?, un beso e interesante punto de vista.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Chocolates!

Mi foto
Verónica Gsm
Fanática de la utopía y cursi de clóset. Nómada. Creo en lo que no cree casi nadie y desconfío de aquello en lo que creen muchos. Mi alter ego se llama Violetta. Nunca me he enamorado a medias; me enamoro o no y cualquiera de las dos, se me nota. Algo Facebookera pero muy Twittera. Me gustan las historias ajenas y las frases sueltas. No corro, no grito y no empujo. Terca como mula y aferrada como capricornio. Cuando el mundo se me enreda, camino y si se me pone muy de cabeza, tomo una maleta y me voy a dar el rol. Tengo adicción por los mensajes de texto y/o las visitas inesperadas a deshoras de la noche; por NY, por San Cris, por los "chick flicks", por los libros de Angeles Mastretta y por los chocolates con mazapán de Sanborns. De vez en cuando practico el autoboicot. Escribir es el saco que me cobija y a veces ese saco le queda a alguien más.

Fologüers.