De "Las amorosas más bravas"


No puedo quejarme de mi vida.


Fue la idea intermitente en mi cabeza ayer durante la presentación de un libro que representa el trabajo conjunto de la fotógrafa Bénédicte Desrus y de la periodista y escritora Celia Gómez Ramos.

Las mujeres de la Casa Xochiquetzal - una casa hogar para prostitutas de la tercera edad, ubicada en el centro histórico del Distrito Federal- tienen nombre y apellido, pero la sociedad las ha etiquetado como "sexo servidoras", aunque ellas prefieren ser llamadas putas o rameras. 

El nombre "sexo servidoras" no define en lo más mínimo todas las historias de estas mujeres que, a decir verdad y como bien se dijo durante la presentación, más bien deberían ser llamadas "trabajadoras sociales" por las diversas artes y menesteres en los que han tenido que involucrarse para poder ofrecer una de las cosas más humanas y naturales en una sociedad juiciosa que muchas veces las acribilla sin conocerlas: placer.

Ayer durante la presentación en la Capilla Alfonsina, estas mujeres perfectamente arregladas ocupaban al menos cinco de las filas de sillas que resultaron pocas para la gran cantidad de gente que se reunió a celebrar el trabajo de Celia y Bénédicte y la historia detrás de cada una de Las Amorosas Más Bravas.

Cuando uno observa a jóvenes mujeres ejerciendo esta profesión en las calles, portando diminutos vestidos sin importar el clima ni la hora, uno las siente casi ajenas al mundo, tan diferentes a todas las demás mujeres; y si pocas veces nos ponemos a pensar en sus vidas, en su infancia, en sus alegrías y tragedias, es casi seguro que nunca pensamos qué es de ellas al alcanzar la tercera edad, tomando en cuenta que en esta profesión la "senectud" se alcanza a los 40 años.

Llegar a los 40 años, las más de las veces con una infancia y/o adolescencia triste detrás, con un historial de abusos tanto físicos como emocionales, habiendo tenido que irse a la cama con hombres de todos colores, sabores y con cualquier tipo de perversiones en mente, muchas de ellas sin conocer otro oficio, sin saber escribir ni leer y sin el respaldo de las prestaciones de ley, implica quedarse a la deriva. 

Me conmovieron sus agradecimientos, sus testimonios, sus lágrimas honestas, me sentí infinitamente afortunada porque aunque quizá ellas y yo no tengamos mucho en común, compartimos el género y eso sobra y basta para intentar ser empática. 

"Gracias por llevarme a conocer Acapulco" dijo una de ellas con la voz entrecortada y me partió el corazón. Cuán afortunados somos muchos, cuántas cosas buenas tenemos y sin embargo seguimos quejándonos y sufriendo por lo menos importante. Ellas siguen sonriendo sin tregua.

La Casa Xochiquetzal acepta donativos económicos y en especie. Todo sirve, así que si tienen algo en buen estado pueden encontrarlas en:

http://casaxochiquetzal.wordpress.com/ 

en Facebook https://www.facebook.com/pages/Voces-de-Casa-Xochiquetzal/272172642902263

y en Twitter @VozXochiquetzal

Parte de las ventas del libro también serán destinadas a la casa.

Lo que aparece al inicio de este post es la invitación para la segunda presentación del libro. Si me permiten un consejo vayan, obsérvenlas, admiren su perseverancia ante la vida, su espíritu camaleónico que les permite pasar de ser bravas a ser protegidas bajo un lugar como la Casa Xochiquetzal que les ofrece refugio, abrigo y quizá hasta la familia que nunca antes habían tenido o que perdieron en el camino.

Hacía falta que alguien se metiera hasta la cocina, literal, con un ojo sensible como el de Bénédicte y un oído agudo como el de Celia; la combinación ha dado como resultado un libro que sin duda les devuelve mucho a ellas, a las más bravas.

Comentarios

  1. Pues si ahora que te leo, me odio por no haber podido asistir a dicha presentacion y si en efecto esta sociedad es mas quejosa, entre mas se te de mas queja, así como a los hijos que todos les dan, mas odiosos, y que padre que se exploro a estas mujeres, para valorar mas lo que tenemos.

    ¡Ahora quiero el libro!!!! :(

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  2. ¡Aurora! Pos sí te la perdiste pero puedes comprar el libro. Avísame si lo quieres y te digo cómo conseguirlo ;)

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  3. ¿Cómo y dónde comprar el libro "Las amorosas más bravas" de Bénédicte Desrus y Celia Gómez Ramos?
    https://www.facebook.com/events/621293214612226/

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Verónica Gsm
Fanática de la utopía y cursi de clóset. Nómada. Creo en lo que no cree casi nadie y desconfío de aquello en lo que creen muchos. Mi alter ego se llama Violetta. Nunca me he enamorado a medias; me enamoro o no y cualquiera de las dos, se me nota. Algo Facebookera pero muy Twittera. Me gustan las historias ajenas y las frases sueltas. No corro, no grito y no empujo. Terca como mula y aferrada como capricornio. Cuando el mundo se me enreda, camino y si se me pone muy de cabeza, tomo una maleta y me voy a dar el rol. Tengo adicción por los mensajes de texto y/o las visitas inesperadas a deshoras de la noche; por NY, por San Cris, por los "chick flicks", por los libros de Angeles Mastretta y por los chocolates con mazapán de Sanborns. De vez en cuando practico el autoboicot. Escribir es el saco que me cobija y a veces ese saco le queda a alguien más.

Fologüers.